La quinoa, considerada un superalimento por su gran cantidad de nutrientes, es una semilla que se usa igual que un cereal. Es rica en hidratos de carbono aunque, a diferencia de ellos, no contiene gluten y es una fuente muy importante de proteínas de alta calidad. Además es rica en vitaminas y minerales y tiene gran cantidad de antioxidantes con numerosos beneficios para la salud.

Una vez tostada y cocida como detallo a continuación, la puedes mezclar o combinar con los ingredientes que más te apetezcan o que tengas en ese momento disponible, pero sin pasarte, para que puedas saborear la quinoa tostada que es deliciosa.

En este caso vamos a utilizar los siguientes:

Ingredientes:

• 250 gramos de quinoa
• 1 cebolleta grande
• 2 ajetes tiernos
• Medio pimiento rojo pequeño
• Media berenejena o una pequeña
• Medio calabacín o uno pequeño
• Sal y aceite de oliva virgen extra

Preparación:

Aunque el paquete ponga que ya está lavada, lo primero que hay que hacer es lavarla para quitarle la saponina, que le da un sabor amargo muy desagradable. Para ello se pone en un colador fino que no deje pasar el grano y se lava bajo el grifo. A continuación la escurrimos bien y la tostamos en una sartén con 2 cucharadas de aceite durante unos 5 minutos, moviendo continuamente con cuidado de que no se queme. Cuando se ha tostado desprende un olor a nuez muy agradable que también le da sabor al plato que cocines.

Una vez tostada, le echas 350 ml. de agua caliente con sal (algo más que la cantidad de quinoa que vayas a cocinar sin llegar al doble), y lo dejas que se cueza a fuego lento durante unos 15-20 minutos, hasta que veas que el grano se ha abierto. En casa nos gusta que no quede excesivamente cocida, así que procuro poner la cantidad de agua justa para que se cueza y no quede líquida. Comprueba que esté cocida y la reservas.

Mientras se cuece la quinoa, se lava y trocea la cebolleta y los ajos tiernos para sofreir en otra sartén con un poco de aceite de oliva (unas 3 cucharadas). Cuando esté dorado, se echa el pimiento rojo.

Trocea la berenjena y métela en el microondas unos 5 minutos para que se ablande. Acto seguido la añades al sofrito, salpimientas y esperas a que quede todo bien rehogado.

En cuanto al calabacín, lo puedes añadir al sofrito y cocinarlo al punto que más te guste. En este caso, lo he hecho a la plancha, al dente. Corta unas rodajas y ponlas en una sartén a la plancha con un poquito de sal y una gota de aceite en cada una de ellas. Cuando estén doradas, se parten a trocitos y se añade directamente a la quinoa.

Una vez esté bien sofrita toda la verdura, añádela a la quinoa, mézclalo todo y espera unos minutos a que se integren sus sabores antes de servir. Si lo deseas, añade unas nueces picadas.

Dedicada a mi sobri Elisa… Una combinación ideal para disfrutar. Pruébala!